Dentro de la hiper-prolífica cyber-militancia argentina, circulan por mail infinidad de textos interminables, muchos de ellos con más vocación que ideas. Este, de autor anónimo, es breve, contundente, claro y no excento de humor. Una feliz y poco frecuente combinación.
Ser o no ser
Cacerola
"Cacerola" es mucho más contundente que "Gorila".
No sé qué pensarán ustedes, pero que a uno le digan que “sos cacerola” para mí es un insulto de esos de los que ya no se regresa.
Porque mientras el Gorila es un sujeto con plafond teórico y experiencia histórica, el Cacerola es un tocador de oído, alguien al que apenas lo corrés se mete en la casa a ver televisión para encontrar la línea. El Cacerola no es anti-K porque si, sino porque él corre con la moda. Si mañana la onda es otra el Cacerola cambia de puro careta que es.
No es antiperonista porque le moleste Perón, lo que al Cacerola mas le incomoda del peronismo es su proclividad al Subsidio, la idea de que por lo bajo un puntero le pase guita a un zombie sin cabeza. El Cacerola no sabe que el taxi está subsidiado, que el bondi está subsidiado, que el semáforo de su esquina es producto de un Subsidio, que su factura eléctrica lleva un subsidio que le abarata la vida, los alimentos y los servicios.
Por eso el Cacerola cree que la Argentina es un país Caro - el más caro- que debería ser Gratis solo para él, ignorando que es un país Barato por obra y gracia del Matrimonio que detesta.
Sus creencias son inagotables.
Desde creer que la plata del Banco Central esta apilada en filas sobre gigantescos pasillos y que tipos como Redrado impidieron patrióticamente que un grupo de Negros la usurpen hasta informes pormenorizados que prueban un red de negocios y negociados entre los K y millones de funcionarios estatales con baja disposición hacia el trabajo, todo exita al Cacerola que declara constantemente que su Paciencia se agota. Pero su paciencia es eterna como un comentario final de Pepe Eliaschev, porque en definitiva la Estupidez no tiene fin.
El Cacerola tiene un imaginario increíblemente caótico. Cada 2 meses anuncia un corralito, una renuncia en masa de Gabinete y obviamente un cacerolazo nacional. El sumum de su ánimo de mierda fue el 28J, pero cuando vieron que la Ley de Medios era un hecho todo cambió y el ánimo fue el sumum de la mierda que tenían adentro.
El Cacerola del que hablamos, no es ese subproducto dosmilúnico dispuesto a unirse al piquete. Nada mas alejado. Este Cacerola ni sabe dónde queda el Conurbano-sitio geográfico al que solo acude de día- ni sabe de Política. Ni siquiera vota. Este Cacerola es un producto televisivo generado como reacción al kirchnerismo, mas que una producción social, este sujeto es una orden de Clarín, un menjunje retorcido generado en las lecturas de Perfil, los programas lanáticos, léuquicos y canaltrécicos.
Morales Sola es gorila, pero TNbaum es cacerola.
Grondona es re-gorila, pero Rozitchner por ejemplo, es re-cacerola, no sé si se grafica mejor así.
Y obviamente -como se imaginarán- Pino no es Gorila, no sé si me explico.